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Una familia musical

Cuando vienes de una familia de músicos, es difícil que no se te pegue algo. Desde que era un bebé, mi madre ya empezó a cantarme y a poner música clásica en el tocadiscos apoyándose en teorías que aseguraban que, reproducir composiciones de Mozart y Bach, particularmente piezas de órgano y piano, son mano de santo para relajar a los recién nacidos.

Mi madre era una entusiasta empedernida de la música, fue profesora de piano durante una gran parte de su vida, hasta que tuvo tres hijos y necesitó dedicarse en cuerpo y alma a nuestra educación, porque doy fe de que no se lo pusimos nada fácil. Una vez entramos en edad de aprendizaje, los tres hermanos nos adentramos en el mundo de la música.

Una inteligencia musical

En nuestro caso, es importante resaltar el papel que desempeñó nuestra familia inmediata, ya no solo mi madre, sino también mis abuelos, para la mejora de la inteligencia musical y la capacidad de escucha cuando éramos niños pequeños. Este término, “inteligencia musical”, sugiere que las personas no poseen varios grados de una inteligencia general, sino que cada individuo posee a la vez varias inteligencias, algunas mayores que otras.

Entre las siete principales inteligencias, la inteligencia musical (que incluye la capacidad de escuchar), se propaga como una inteligencia separada y considera igualmente merecedora de desarrollo. Los individuos con una alta inteligencia musical “piensan en música” con mayor claridad y se ven afectados más profundamente por la música, en un sentido estético, que aquellos con menos inteligencia musical.

Un equipo musical

Debido a ello, no tardamos en entrar en el conservatorio y orientar nuestras expectativas profesionales hacia los instrumentos. Cuando empezamos, los tres coincidíamos en que el mundo de la música se estaba enfocando hacia el “marketing” en lugar de hacia la calidad musical, pero hoy en día nos parece un hecho irrefutable.

Es una bendición que hoy en día sea posible subir un vídeo a YouTube y convertirse en una estrella de la noche a la mañana. Producir música se ha convertido en algo al alcance de la mano de casi todo el mundo cuando, hace muchos años, se reservaba únicamente para el sector más privilegiado, pero la realidad es que también ha transformado el panorama musical en algo en lo que importa más la estética y productividad económica del artista, que la misma calidad del producto. Por eso, los tres hermanos de nuestra familia decidimos crear un blog en el que tratar cualquier tipo de música desde un punto de vista objetivo y didáctico.